Ya sólo quedan dos días más…

Hoy me la pasé todo el día arreglando mi recámara, tengo idea de dejarla lo más linda posible; sin embargo lo dejé hasta el final de mis vacaciones. ¿Les ha pasado alguna vez que cuando quieren hacer limpieza en un cuarto tan personal como su recámara se vuelve una tarea interminable? Cada hoja que sacas de tus cajones llegó ahí por tener algún significado especial, quizá era una carta de algún amor del pasado o tal vez, un trabajo de la escuela en donde obtuviste muy buena calificación.

A mí me pasa eso cuando hago limpieza ya que llego a mi recámara después de desayunar cerca de las 10 de la mañana(sobre todo ahora que son vacaciones y puedo hacerlo), enciendo mi laptop y pongo música de los Beatles me acerco con la silla a mi librero y comienzo a revisar cada hoja suelta, cada libro, cada disco; todos ellos tienen algún valor especial para mí, traen a mi mente recuerdos que me hacen cerrar los ojos y revivir el momento y entonces viajas durante algunos instantes al pasado; en algunos momentos hasta puedes sentir algo mágico… Casi como si estuvieras viviendo ese momento nuevamente.

Y es justamente por eso que tardo tanto, quizá porque tiendo a agregarle mucho valor a las cosas y puedo en momentos a llegar a acumular cosas como por ejemplo ese boleto del cine que conservo de hace tantos años cuando fui por primera vez con alguien a quien llegué a amar y con quien pude haberme casado, pero que sin embargo no se dio. Aún así guardo su recuerdo para mí, como prueba de que alguna vez besé a la persona que más he amado en la vida.

Pero en fin, espero poder terminar el sábado o el domingo ya que sólo me quedan esos dos días para volver a la rutina de mi vida. Te agradezco por dedicar unos instantes de tu vida, para conocer un poco de la mía.